"Cuando las cosas marchan mal, el mundo entero parecería complotar en nuestra contra y, a falta de una, nos caen todas las fichas miserables, juntas, densas, difíciles de soportar.
Cuando las cosas andan bien, ahí todo cambia, nos endulzamos con la felicidad y, por qué no, sentimos que la suerte juega de nuestro lado.
Lograr el equilibrio entre ambas es el principal desafío. Solo los privilegiados lo consiguen: rescatar lo bueno de lo malo y lo malo de lo bueno. Yo nunca lo logré, pero sus dibujos permitieron acercarme aunque sea un paso más. Me brindaron dos herramientas fundamentales: el color y la m